Al mal tiempo… ni buena ni mala cara; mejor, Animación Suspendida

La posibilidad de morir y resucitar horas o días después es algo que ya no se ve tanto en estos días, sin embargo, algo que ciertas especies del reino animal si experimentan es la animación suspendida. Se denomina así al estado en el que entran ciertos animales, cuando las condiciones son desfavorables. Es este estado, la tasa metabólica de los animales disminuye casi totalmente, pero, sin llegar a cero, a su vez, su consumo de oxígeno también disminuye, y por ende, su temperatura. Es como si tocasen el límite entre la vida y la muerte.

Algunos animales que recurren a la animación suspendida, la rana de madera, el caracol de jardín, C. elegans, y ciertos peces pulmonados.

De los ejemplos más famosos, está el de la rana de bosque o rana de madera, la cual, se congela para sobrevivir la temporada de invierno. Durante el congelamiento, la respiración, los latidos del corazón y el flujo sanguíneo de la rana están suspendidos. Cuando sube la temperatura, la rana comienza a descongelarse, sus funciones vitales retoman su ritmo normal y continua con su vida con gran naturalidad.

Existen muchos otros animales capaces de entrar en animación suspendida en situaciones particulares, como por ejemplo:

  • Los caracoles de jardín, cuyo caso es el contrario, el calor excesivo es lo que los obliga a entrar en éste estado.
  • Ciertos peces pulmonados, quienes recurren a la animación cuando el agua del medio en el que viven se seca.
  • El gusano C. elegans, ante concentraciones muy bajas de oxígeno.

Numerosos experimentos se han hecho con otras especies para lograr llevarlos a este inter entre la vida y la muerte. Por ejemplo, cuando los ratones se les administra sulfuro de hidrógeno vía inhalatoria, su ritmo respiratorio disminuye en mas del 90 % y su temperatura disminuye hasta la temperatura ambiental.

Experimentos más elaborados se han realizado con cerdos, donde se les anestesió, y su temperatura fue disminuida hasta 10°C, es decir, fueron llevamos a un estado de hipotermia; posteriormente la sangre de su organismo fue reemplazada por solución salina a baja temperatura. Durante hora y media, los cerdos se mantuvieron así, posteriormente, la solución fue vaciada y la sangre devuelta, e interesantemente, el 90% de los cerdos se recuperaron por completo.

En perros, se ha logrado mantenerlos en animación suspendida por hasta 3 horas, con ayuda de un bypass cardiopulmonar.

En humanos, la investigación al respecto sigue aún en curso. Pero ¿cuál sería el provecho de todo esto? La imaginación no se ha hecho esperar, algunos plantean que se podría realizar misiones espaciales, en cuyos largos viajes, la tripulación se encuentre en animación suspendida, otros hablan de la animación suspendida como una posibilidad para poner en estado espera a aquellas personas con alguna enfermedad para la cual no haya cura en ese momento.

En la clínica, el pragmatismo pesa sobre el romanticismo. Día a día, en urgencias se reciben pacientes con heridas graves. Si bien, la herida podría ser reparable, la perdida de sangre y los daños al sistema nervioso central, hacen que la muerte sea cuestión de horas. Cuando un paciente pierde cantidades considerables de sangre, primero presenta hipotensión, posteriormente se pierde el pulso, en este punto, el cerebro tiene cerca de 5 minutos y el corazón 20 antes de que sufran daños irreversibles; finalmente, la gran mayoría de los pacientes mueren por paro cardiorrespiratorio.

La animación suspendida (o preservación de emergencia y resucitación, que es como se prefiere llamarle en clínica) le daría a los médicos el tiempo suficiente para reparar la herida y estabilizar al paciente. De igual manera, se podría utilizar en aquellos pacientes con paro cardiaco.

La seguridad y viabilidad de sustituir la sangre por solución salina a bajas temperaturas está aún por probarse, y el uso de un bypass cardiorrespiratorio no se descarta, pero la hipotermia inducida es algo que poco ha comenzado a utilizarse de forma moderada, desde cirugías del corazón en adultos, hasta neurocirugías en niños y recién nacidos.

Finalmente, cabe mencionar que la hipotermia inducida es muy distinta a la hipotermia espontanea, es decir, cuando una persona alcanza un estado de hipotermia por algún desafortunado incidente, significa que el cuerpo ya ha sufrido ciertos estragos, como el agotamiento de sus reservas de energía. En este caso, la hipotermia no es de utilidad para tratarlo.

Habrá que esperar cierto tiempo antes de que la hipotermia inducida, y mas aún la animación suspendida, sean una alternativa de supervivencia para los pacientes en urgencias. Pero hay una cuestión que desde ahora llama la atención. Debido a que los pacientes candidatos para estos métodos, serían aquellos cuyo desenlace fatal sea casi seguro con cualquiera otra alternativa, en Estados Unidos no se requeriría un consentimiento informado. Tu ¿cómo ves? ¿estás de acuerdo con ello?

H Macías

Fuentes:

Alzogaray, R. (2009). Ríos de Sangre y Otras Curiosidades Explicadas por la Ciencia (1st ed., pp. 54–58). Buenos Aires: Capital Intelectual.

Alam, H. B. (2012). Translational barriers and opportunities for emergency preservation and resuscitation in severe injuries. The British journal of surgery, 99 Suppl 1(Suppl 1), 29–39. doi:10.1002/bjs.7756

Gunshot victims to be suspended between life and death – health – 26 March 2014 – New Scientist. (n.d.). Retrieved April 17, 2014, from http://www.newscientist.com/article/mg22129623.000-gunshot-victims-to-be-suspended-between-life-and-death.html?full=true#bx296230B1